Acciones
Detección de maltrato, abandono y deprivación materna
Las Maternidades pueden ejercer violencia como instituciones al separar las madres de sus familias, al someterlas a prolongadas esperas, al negarles información, al no pedirles autorización para determinados procedimientos, al maltratarlos verbalmente o con conductas inapropiadas, etc.
Esta violencia institucional debe ser admitida como real, tratada y finalmente evitada.
También debe detectarse el desgraciadamente frecuente hecho del maltrato de los padres hacia sus hijos, aún recién nacidos.
El maltrato puede manifestarse como agresión física pero también como deprivación afectiva o falta de estimulación adecuada.
Es responsabilidad de los Centros Perinatológicos detectar e intervenir, para lo cual existe legislación.
Los Centros Perinatológicos tienen que ser el primer lugar en donde mejor se respeten los derechos humanos.